Control biologico en la ciudad de Buenos Aires

Como la mayoría de ustedes habrá escuchado el ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad de Buenos Aires opto por la práctica de la cetrería para intentar combatir la superpoblación de palomas. Esto que a primera vista parece algo positivo ya que no solo reconoce a la cetrería como una posible herramienta si no que les permitiría a algunos cetreros trabajar de lo que tanto nos gusta, puede convertirse en un arma de doble filo. Si las cosas no se hacen bien corremos el riesgo de ganarnos el titulo “comerciantes” y ponernos a la sociedad en contra, algo que no nos ayudaría demasiado ahora que le queremos dar un marco legal a esta actividad. Ahora más que nunca debemos hacer buena letra (recuerden el evento que se viene para el año próximo).
Si es verdad lo que dice la nota la idea es volar 30 ¿razas? De halcones, peregrinos, plomizos y “pechirrojo”, supongo que se referirán al peregrino, el aplomado y el cernícalo. De halcones no tengo ni idea pero no me imagino a un peregrino haciendo pasadas al señuelo en la 9 de julio o a un aplomado persiguiendo entre los edificios. Para mí le erraron de especies. Pero supongamos que esas especies son correctas ¿Cómo van a hacer para volar 30 pájaros? ¿Serán 30 cetreros? ¿15? ¿Serán cetreros?
También habla de volar las aves, al principio, una vez por mes. Supongo que esto será un error del periodista porque si los cetreros piensan eso dejan en claro que de control biológico no saben demasiado.

Les dejo el link de la nota y espero conocer sus opiniones.

http://www.perfil.com/ediciones/2011/12/edicion_635/contenidos/noticia_0020.html